¡Indignaos! y los formatos para el panfleto

Leí hace unas fechas una versión que circulaba por ahí de ¡Indignaos! de Stéphane Hessel, un panfleto que llama a la movilización que ha sido un rotundo éxito, primero en Francia y casi simultáneamente en todo el planeta.

Hessel participó en la redacción de la Declaración universal de Derechos Humanos y tiene un historial vital de esos que parecen escritos para llegar a la gran pantalla. El librito, en su versión papel sólo tiene unas treinta páginas y se vende a 3 euros en francés. Muy acorde con lo que va a venir en las redes y que en Amazon ya están poniendo en práctica con Singles: textos cortos y baratos.

Personalmente el texto no me dijo demasiado, y entiendo que su principal virtud tiene que ver con el argumento de autoridad. En cualquier caso contiene verdades que conviene airear sin descanso y su circulación es una buena noticia. Ahora aparece la versión impresa en castellano prologada por José Luis San Pedro y lo primero que veo es que vale casi cinco euros, que se me antojan demasiados para un texto tan corto. Entiendo que hay gastos de edición que no decrecen con el número de páginas pero cabe preguntarse entonces si este es el formato adecuado para el panfleto político…porque de veras que esto se lee en unas cuantas paradas de metro, casi sin transbordo.