Todo lo que he escrito sobre Ofelia Nieto

Recopilo algunas cosas que he venido escribiendo sobre Ofelia Nieto 29 en los últimos tiempos (las que tienen contenido, me salto un par de posts que informaban de citas). La compilación tiene sentido porque han aparecido hasta en cuatro sitios distintos
Va por orden cronológico;

Victorias íntimas

Hoy he llorado en el andén del tren

camino de trabajo.

O bella ciao, bella ciao, bella ciao, ciao, ciao

Sí, sonaba Bella Ciao

y resonaban frente a mi

las bocinas de los coches

que pasaban esta madrugada por Ofelia

y enunciaban enérgicas

¡SÍ SE PUEDE!, ¡SÍ SE PUEDE!

Así:

¡PI PI PIPI!, ¡PI PI PIPI!

Dejo este pequeño rastro

desde el trabajo,

con lágrimas figuradas

flotando en la pantalla,

con Bella Ciao en los cascos

y un desfile de rostros recios

desbordados, emocionados,

en una atmósfera de vapor

de lágrima digna, nacido en el calor

del asfalto de un verano madrileño

digno como pocos.

Una mattina mi son svegliato,

e ho trovato l’invasor.

Las bocinas de los coches

que pasaban esta madrugada por Ofelia

enunciaban enérgicas

¡SÍ SE PUEDE!, ¡SÍ SE PUEDE!

Así:

¡PI PI PIPI!, ¡PI PI PIPI!

Y la policía no se atrevió a aparecer

En agosto no para la POLÍTICA, paran sus politiqueos

Esta pancarta colgaba de un autbús turístico de Madrid. Algunos "guiris" gritaban ¡Sí se puede!

Esta pancarta colgaba de un autbús turístico de Madrid. Algunos «guiris» gritaban ¡Sí se puede!

En agosto, las portadas becarias se alternan con eso que llaman serpientes de verano: este año tocó Gibraltar, la zona erógena más calentorra del paisanaje carpetovetónico. Agitado el bebedizo, claro, con cuentecitos de verano de la editorial del grupo y la versión más contraportada del Hola de cada periódico: los posados veraniegos de José María, las vacaciones campechanas de la realeza – siempre fue muy del gusto del padre de familia al uso la gorrita de capitán – o el discreto veraneo de ZP.

La política, entendida como espectáculo institucional (y sus relatores) descansan en verano, y como la vida tiene la jodida manía de seguir durante el mes de agosto (últimamente arrastrándose entre sofocos y apreturas), esto ha permitido que aflore la política en agosto, la POLÍTICA entendida como el desempeño de los asuntos públicos por parte de los ciudadanos.

Es en este estado de relajación sistémica cuando podemos mirar con más claridad el panorama y aprender a diferenciar instituciones de política; espectáculo de compromiso; representación de democracia.

Les cuento. Hay gente de Tetuán (y de Manoteras, Aranjuez, de Barcelona, de aquí, de allá, de todos lados), que se ha empeñado en ayudar a que una familia no pierda su casa. Digo bien ayudar, porque los miembros de la familia Gracia González (muy especialmente sus mujeres) llevan luchando desde hace diez años contra el desdén del ayuntamiento por las vidas de las gentes comunes. Trazo línea aquí, junto un terrenito allá para mi amiguete…y al vecino que se le ocurra vivir sobre la servilleta en la que diseñan sus majaderías en sobremesa, con puro y pacharán, le mando a la policía. Que para eso la pagamos todos.

El pasado 14 de agosto se paró el primer intento de desalojo del hogar de la familia Gracia González. Ese día, unas setenta personas resistían en la azotea de la casa; cinco personas se habían encaramado al tejado dispuestas a no bajar si no era por la fuerza; medio centenar más en la calle rompió el cordón policial; «os va a costar mucho trabajo sacarnos a todas a rastras», repetía el chico del megáfono…la policía y la grúa se tuvieron que marchar. Toda una escena épica que, sin embargo, se lee mejor en claves líricas a poco que te acercas a las elipsis narrativas: cuidados mutuos, emociones a flor de piel, niños correteando…

Desde ese día 14, cada día y a todas horas, ha habido gente resistiendo en la casa junto a las tres generaciones de la familia de Ofelia Nieto. Ya sólo quedan cinco días para que expire la orden de un mes que permite el desalojo en cualquier momento, y pase lo que pase, lo de Ofelia Nieto se ha convertido ya en un hito de la dignidad.

Ya hace un par de años que el asfalto de Madrid se desembarazó del programa de letargo estival. Aquel verano, el que siguió a la primavera del 15 de mayo – con la Puerta del Sol en estado de excepción – los que quedaban en la ciudad se congregaron para asediar pacíficamente la plaza día tras día hasta librarla…de la nada protegida policialmente.

Durante este tiempo, muchas cosas han dejado de ser para siempre lo que solían: el relato feliz de la transición y la democracia que todos nos dimos; el no estar en estado de alerta continuo ante la realidad; el sentirnos dentro…

Un clic en la cabeza de muchos ciudadanos, un relato que hace crack. POLÍTICA de reconquista ciudadana que también este verano pone de manifiesto que en agosto no para la POLÍTICA: paran sus politiqueos.

* Este post no está escrito en el tono de la mayoría de los de este blog. Me divertía escribirlo a la forma de los espacios de opinión de los periódicos. Curiosamente, hace poco me di cuenta de que así escribía el blog cuando lo empecé hace una década, hasta que pasó, poco a poco, a ser un blog, no un medio de comunicación unipersonal.

Negras vistas

descampado

En el momento en el que escribo estas líneas mi casa está llena de humo y huele a chamusquina. Las vistas desde la ventana (da a un gran descampado) son ahora negras, moteadas por el azul del uniforme de los bomberos, que terminan de apagar los últimos focos del incendio.

En el momento que escribo estas líneas leo – también- que la familia que habita el inmueble de la calle Ofelia Nieto 29, también en mi barrio, se ha encontrado su casa precintada. Se la quieren tirar abajo el próximo día 14. La excusa es un trozo mínimo de acera (que ellos han ofrecido perder), la verdadera razón: la especulación con el terreno. Un robo.

En el descampado de al lado de mi casa (calle Tiziano), vive un indigente, al que he visto salir por su pie de entre las llamas, un montón de gatos, ocasionalmente juegan niños…Está pegado a las viviendas de la calle Teruel. En el descampado de al lado de mi casa antes vivía gente, algunos en casas bajas, pero la inmobiliaria adjudicataria de las obras del PERI Tiziano Dulcinea desapareció un buen día con la pasta. Algunos vecinos involucrados en el proceso se quedaron sin casa. Se supone que ahí tendría que haber un parque y dotaciones deportivas. Ni eso ni casas. Sólo rastrojos, basura y gatos.

En el momento que termino de escribir estas líneas veo claro el futuro de ese pedazo de espacio si no conseguimos parar in extremis este derribo injustísimo: vacío, basura, incendios…La no-vida actual, por cierto, del solar de al lado, el que el ayuntamiento pretende juntar a este para mejor especular.

Negro ceniza. Desposesión, rapiña y deshumanización. Estas son las vistas de nuestras ventanas en mi barrio.

Se ha preparado una permanencia para la noche del 13 al 14 en la azotea de la casa y un Stopdesahucios a partir de las 7 de la mañana del 14 ¡hay que parar este derribo!

Diez años y seguimos

El pasado junio esta bitácora mía tan amada como maltratada cumplió diez años. Con distintas urls, algún parón ocasional como este que la ha tenido ahora unos tres meses en el quirófano, autodestrozos… Por el camino apareció mi otro blog, para temas más profesionales, con su foto y todo.

El otro día, por fin, saqué un rato para mezclar varios ficheros MySQL que tenía guardados, aunque me faltó precisamente el último (los meses más recientes) que próximamente estarán también incorporados a este engendro que es la memoria de toda una etapa de mi vida.

Seguimos para bingo