Tercer lugar (y biblioteca universitaria)

En 1989, el sociólogo Ray Oldenburg, profesor emérito de la Universidad West Florida, publicó el libro “The Great Good Place”, en dónde exponía el concepto de “tercer lugar”. Oldenburg defendía la necesidad de un “tercer lugar social” que complementase el familiar (primer lugar) y el laboral (segundo lugar). Era necesario, decía, construir un espacio social en donde las personas no tengan que desplazarse excesivamente del primero y del segundo lugar, y donde puedan fomentar relaciones duraderas con otras personas de su entorno más próximo. En las sociedades del siglo pasado, este tercer lugar estaba ocupado por organizaciones como iglesias, ateneos o instalaciones deportivas y comerciales, en donde los ciudadanos

las teorías de Oldenburg están entrando también en la educación superior. La pregunta que surge inmediatamente sería: ¿facilitan y promueven las universidades espacios para que los estudiantes adquieran una experiencia de aprendizaje integral o son, como se suele decir, academias expendedoras de títulos?

En las universidades, tradicionalmente, el “primer lugar” ha sido siempre el aula. Respecto al “segundo lugar” docente, posiblemente todos estaríamos de acuerdo que son los campus digitales. Por último, el “tercer lugar” de la universidad es la biblioteca.

La biblioteca como un centro de recursos para el aprendizaje: crear un entorno rico de recursos, “learning commons”

La biblioteca como laboratorio: con todo tipo de herramientas “makers”, espcios de coworking.

La biblioteca como centro cultural: social library, con espacios dedicados a exposiciones, conferencias y debates

Fuente: La biblioteca universitaria: el tercer lugar / Didac Martínez

Relacionado con este concepto, podríamos hablar del concepto de palacios del pueblo, del sociólogo Eric Klinenberg. Cree que el futuro de las sociedades democráticas no se basa simplemente en valores compartidos, sino en espacios compartidos: las bibliotecas, las guarderías, las iglesias y los parques donde se forman conexiones cruciales.

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