Días duros, días raros, tele y radio.

El sarcasmo onírico este de los últimos días me tiene muerto de miedo por lo que vislumbro la condición humana puede llegar a hacer. Y no hablo sólo de los terroristas, sino de algo menos evidente y que toca más de cerca a esta bitácora en cuanto que atañe al mundo de la información. Desde el jueves mi sorpresa era mayúcula, todos los medios de comunicación haciendo un espantoso ridículo que no se explica más que por el dictado de los jefes que, directa o indirectamente, alimentan sus acomodados cuerpos. Mientras gran parte de la población fraguaba la idea clara, intuible desde un primer momento francamente, de que el atentado no lo había hecho ETA, todos los periodistas de las televisiones, radios y periódicos culpaban a ETA sin oponer duda alguna a la mentira de Interior. Pero aquí, tanto en el gobierno(aún en funciones) como en los medios, nadie pedirá responsabilidades. Según avanzaban los acontecimientos sólo a través de internet y del satélite pudimos irnos enterando de lo que en el extranjero era un grito casi unánime. Parece que lo unico que importaba a los medios, en un ejercicio de morbo acojonante, era enseñar miembros amputados y a gente traumada.

Y mientras nuestras cadenas estatales de campaña electoral, en Telemadrid emiten el documental sobre Fernando Buesa el viernes y en la uno el sábado, y hasta la propia asociación de Fernando Buesa pide explicaciones claro. Luego hablarán del respeto por los muertos.

La manera en como se produjo el acceso a la información y las movilizaciones populares parecen confirmar que los espacios de democracia tenemos que currárnoslos dese abajo y al margen de la pantomima institucional, con el aliado de las nuevas tecnologías.

Ayer por la noche empecé siguiendo la jornada electoral en Radio Euskadi, porque estaba mi amado Javier Ortiz, pero como no le daban mucha cancha y mi dedo estaba nervioso me empleé el resto de la noche en el «zapeo» compulsivo. De risa Telecinco, su encuesta(que no era a pie de urna sino previa y por teléfono) la cagó por muuuucho, y sin embargo los muy ineptos no cesaban de sacarla y estudiarla, a pesar de que los primeros resultados la habían dejado ya en evidencia. Un poco más de reflejos no les habrían venido mal, no. Ya con los resultados cantados, vueltecita por la COPE para escuchar rabiar a Jimenez Losantos y algunos otros fascistas de pro.Nunca alegrarse por el mal ajeno fue tan productivo, por eso se ha evacuado al gobierno del PP me temo, por que no ganaran esos señoritos soberbios y muchas cosas más que me callo, más que por convencimiento de que a quien se votaba lo haría mejor.

Como veis el recorrido mediático de estos días «arroja un balance»(que diria uno de estos periodistas de verdad) sumido en el estiercol más hediondo.

*Nota::Este post lo he puesto originalmente en la bitácora hermana Más te digo hoy mismo.