Impagable la nueva sección de cartas al director de La patata de la libertad.
Sr. Director:
Soy un español transportista y padre de tres hijos.
Frente a la campaña que se está lanzando desde el sector progre contra mi locutor de radio favorito, me gustaría aclarar unas cuantas cosas para aclararlas simplemente:
-Se está diciendo que Federico despotrica cruelmente cada día contra todo y contra todos desde las seis y media de la mañana ¡qué calumnia! Los que le seguimos sabemos que su programa empieza a las siete en punto. Hay que tener muy mala fe para lanzar una infúbula de este calibre.
-Se dice que la iglesia subvenciona a la COPE. ¡Ja! ¡Intenten demostrarlo! Y aún, si fuese así ¿qué? ¿Es menos dinero el dinero de la iglesia que el de cualquiera? ¿Acaso no pagamos todos con dinero las cosas que compramos? A ver como salen de ahí.
-He escuchado también que Federico tiene muy mala oratoria y que necesita un logopeda. Eso es sencillamente mentiga. Es gotundamente falso. ¡Que liberen a Frederic!
-Se ha dicho que Federico es un intolerante. Eso lo dicen porque no le saben escuchar. Si lo oyesen de verdad sabrían que Federico sólo se rebela contra progres y otros hijos de puta seguidores de Stalin y de Arzallus.
-Se dice que emplea un lenguaje despectivo para referirse a los políticos que no son del PP. Esto pudiera ser verdad, pero ¿de qué otra forma referirse a esas alimañas corruptas?
-Dicen que Federico está alimentando el rencor entre las dos Españas. De nuevo: eso es falso. Federico y los que le seguimos sabemos perfectamente que España sólo hay una, en concreto, UNA grande y libre.
-Se alude continuamente a su transformación de guerrillero maoísta a pope fascio-liberal. ¿Y qué? ¿Acaso no tiene derecho a redimirse? Yo mismo era falangista hace unos meses y ahora me he dado cuenta de que soy liberal.
Nada más. Ánimo Federico, eres el mejor.
Muy bueno, estoy totalmente de acuerdo con el transportista. Pobge Fedegico.
Todos somos Fedegico.
¿Para cuando una recogida de firmas para defender a este «gran» profesional? ¡Alguién debería dimitir!