Pensaba sentarme a escribir del tedio, y claro buscarle una vuelta de tuerca política: la búsqueda de la imaginación para que no nos consigan adormecer con el aburrimiento de la mediocridad. Ahí es nada. También se me había ocurrido redactar unas líneas sobre lo del Madrid y la Cibeles. Este año nos ahorramos los naturales de Raúl con la bandera de España pero nos surgió con otro asunto muy castizo, aquello de “no sabe usted con quien está hablando”a un guardia. De todas maneras me parece a mi ,y no es por ponerme ahora de defensor de pleitos pobres, que basta ya de sobrevalorar el arte y su protección, no digo yo que cada señor que venga de provincias deba llevarse la mano de la diosa, pero vamos que la ciudad es para la ciudadanía, un poco mal educada, pero eso es otra historia. Pero no tampoco voy a hablar de estas, que ya le dedicamos un apunte hace poco al fútbol y es excederse, además entre lo del Madrid y “lo de Madrid”…Que no, ni de coña de eso tampoco.
El caso es que tenemos un pelín desatendido el cuaderno de bitácora y nuestros feligreses van a pensar que vamos a la deriva, vamos, piensa. En el parque de mi barrio van a hacer el Foro social Barrio del Pilar, la policía de proximidad regala el hachís decomisado en vez de fumárselo, al pobre de los cartones que duerme en el kiosco le ha tocado la lotería y ha decidido montar una fábrica de cestillos para pedigüeños…Joder tío que no, que ni como recurso estilístico está bien inventarse las cosas, eso se lo dejamos a los periódicos de verdad. No se igual vamos a tener que acabar escribiendo del tedio ¿o ya lo hacíamos? ¿con imaginación?