Negras vistas

descampado

En el momento en el que escribo estas líneas mi casa está llena de humo y huele a chamusquina. Las vistas desde la ventana (da a un gran descampado) son ahora negras, moteadas por el azul del uniforme de los bomberos, que terminan de apagar los últimos focos del incendio.

En el momento que escribo estas líneas leo – también- que la familia que habita el inmueble de la calle Ofelia Nieto 29, también en mi barrio, se ha encontrado su casa precintada. Se la quieren tirar abajo el próximo día 14. La excusa es un trozo mínimo de acera (que ellos han ofrecido perder), la verdadera razón: la especulación con el terreno. Un robo.

En el descampado de al lado de mi casa (calle Tiziano), vive un indigente, al que he visto salir por su pie de entre las llamas, un montón de gatos, ocasionalmente juegan niños…Está pegado a las viviendas de la calle Teruel. En el descampado de al lado de mi casa antes vivía gente, algunos en casas bajas, pero la inmobiliaria adjudicataria de las obras del PERI Tiziano Dulcinea desapareció un buen día con la pasta. Algunos vecinos involucrados en el proceso se quedaron sin casa. Se supone que ahí tendría que haber un parque y dotaciones deportivas. Ni eso ni casas. Sólo rastrojos, basura y gatos.

En el momento que termino de escribir estas líneas veo claro el futuro de ese pedazo de espacio si no conseguimos parar in extremis este derribo injustísimo: vacío, basura, incendios…La no-vida actual, por cierto, del solar de al lado, el que el ayuntamiento pretende juntar a este para mejor especular.

Negro ceniza. Desposesión, rapiña y deshumanización. Estas son las vistas de nuestras ventanas en mi barrio.

Se ha preparado una permanencia para la noche del 13 al 14 en la azotea de la casa y un Stopdesahucios a partir de las 7 de la mañana del 14 ¡hay que parar este derribo!